¿Para qué sirve?¿Cuál es la dosis adecuada?
- Para frenar un ataque de pánico. La dosis mínima suele ser 0.5 mg. La dosis máxima suele ser 1 mg.
- Para evitar nuevos ataques de pánico. La dosis diaria suele oscilar entre 1.5 y 3 mg.
- Para reducir síntomas físicos de ansiedad (en menor medida, para reducir el pensamiento/miedo/temor que produce la ansiedad, si es que lo hay) en los trastornos de ansieda, en los trastornos depresivos o en el contexto de una sensación no patológica de miedo/temor. Ejemplos de estos síntomas físicos son: palpitaciones, dolor de cabeza en zona frontal, sensación de tensión muscular, hiperventilación, temblor en las manos, sensación de nudo en la boca del estómago o en la garganta, diarrea, etc. En todos estos casos la dosis diaria suele oscilar entre 0.75 y 3 mg.
- Para facilitar el sueño. No como hipnótico, sino como medicación antiansiedad y, al estar más relajado, que sea más fácil conciliar el sueño. La dosis suele oscilar entre 0.25 mg y 1 mg.
¿Cuáles son los efectos secundarios más frecuentes?
Si prescribimos una dosis superior a la requerida, somnolencia.
Cuestiones a tener en cuenta:
- Globalmente hablando puede mezclarse con cualquier alimento, con cualquier otro fármaco, con cualquier producto natural y con cantidades normales de alcohol.
- Puede tomarse en ayunas o con alimentos.
- Si tras estar tomándolo de forma mantenida durante bastantes días, semanas, meses o años se desea reducir la dosis, no se debe retirar de golpe más de 0.5 mg en un mismo día. Lo preferible es reducir de 0.25 mg en 0.25 mg. En caso contrario, puede haber un síndrome de abstinencia.
- Es un fármaco con capacidad para facilitar su abuso. Globalmente hablando debería ser evitado en personas que hayan presentado abuso de otros productos o de algún juego de azar y en personas muy ansiosas, impulsivas y con mala tolerancia al estrés emocional.
- Disponemos de dos presentaciones, estándar y "retard". El efecto de la forma estándar dura 8 horas, el de la forma “retard” 12 horas.
- En ocasiones se sugiere que si se pone el alprazolam en su presentación estándar (no “retard”) debajo de la lengua, su efecto es más rápido. No se demostrado que este hecho sea cierto. Por otra parte, cabe decir que es muy amargo. Teniendo en cuenta ambas cosas (que no está claro que sea de efecto más rápido al ponerlo debajo de la lengua y que es muy amargo), lo lógico es tomarlo tragado. De esta forma su efecto aparece como mucho en 15 minutos (normalmente antes).